¡Feliz Día Internacional de la Mujer!

Hoy es el 8 de Marzo, Día Internacional de la Mujer. Y aunque todos los días son nuestros, aprovechamos este día como un momento de reconocimiento para nuestras madres, amigas, compañeras de trabajo, hermanas. Un homenaje a todas las mujeres que han cambiado el mundo, que han luchado para conseguir la igualdad y equidad social. Para todas las que seguimos haciendo girar el mundo. Un día para nosotras.

Corría el 8 de marzo del año 1857 cuando un grupo de trabajadoras textiles de Nueva York salió a la calle a protestar por sus míseras condiciones laborales, algo que sentó un precedente en la lucha de las mujeres. Desde entonces, ese día ha sido considerado como el día de la mujer en muchos países, que la ONU proclamó como Día Internacional de la Mujer en 1975.

El color morado fue adoptado como el signo de la lucha de las mujeres en los años 60, ya que era el color que las sufragistas inglesas empleaban para manifestarse en 1908. Un color que, actualmente, sigue siendo símbolo de esta lucha por los derechos de las mujeres.

Por ello, he querido dejaros un pequeño manifiesto que intento poner en práctica cada día. Porque aunque cada día avanzamos hacia una sociedad más igualitaria, aún existen muchos cambios que necesitamos conseguir para poder hablar de igualdad real. Así que, ¡aquí lo tienes!

Manifiesto Anekke Día Internacional de la Mujer:

1. Quiérete. Hazlo tal y como eres, con tus virtudes y tus defectos. Con tus días buenos y malos. Con tus sueños, tus miedos, tus deseos. Queriendo ser madre o sin quererlo. Trabajando como peluquera, ama de casa, profesora, música o ingeniera. Estudiando o trabajando. Luchando para conseguir tus sueños, o luchando para sobrevivir. Luchando para hacer del mundo un lugar mejor. ¡Eres maravillosa como eres!
2. Sé la mujer que quieres. Que nadie te imponga su voluntad, frene tus sueños o te haga pensar que no puedes lograrlo por ser mujer. ¡Sé tú misma!
3. Practica la sororidad. Esta maravillosa palabra no sólo suena bonita, si no que su significado también lo es: el amor y respeto entre mujeres. Porque juntas sumamos.
4. Sueña y enseña a soñar. Los sueños de una niña se convierten en las metas de una adulta. Cultiva los tuyos y, además, permite que las alas de las más pequeñas se extiendan para convertirse en una mujer fuerte, independiente y con igualdad de condiciones.
5. Educa. La educación es fundamental para conseguir la igualdad, y cada pequeño grano de arena para que niñas y niños crezcan en igualdad de condiciones, en una sociedad cada vez más respetuoso y equitativa, cuenta.

Hoy más que nunca, ¡feliz día a todas, valientes!

Anekke